El año más trágico para
el mundo, donde millones de vidas se han perdido a causa de la Covid-19,
singularmente fue de bonanza para uno de los candidatos al balotaje en Ecuador.
Se trata del candidato de la derecha ecuatoriana, Guillermo Lasso. En 2020, según
el Servicio de Rentas Internas, tuvo ganancias de 6.4 millones de dólares que
provienen del Banco de Guayaquil, pese a que él, en el debate ocurrido el
pasado 21 de marzo, había insistido que ya no tiene que ver con la entidad
financiera. Esto revela que Lasso ganaba lo equivalente a 16.000 salarios
básicos en Ecuador, país que alcanza el millón de personas desempleadas a 2021.
Todo esto ocurre en medio del dolor de cientos de miles de familias
ecuatorianas que han intentado sobrevivir en medio de la peor crisis económica
desde el Feriado Bancario.
Y según se registra en
documentos oficiales de tributación en Ecuador, 2020 fue mejor que los 4 años
previos. En 2019 ganó 2 millones de dólares; en 2018, 2.3 millones de dólares;
en 2017, 4.3 millones de dólares; en 2016, 1.7 millones de dólares; y, en 2015,
2.8 millones de dólares. En 2020 sus ingresos fueron de más de 6.4
millones de dólares, en plena pandemia, según datos declarados al SRI.
El Banco de Guayaquil,
en el ranking 2020 fue la tercera entidad financiera con más utilidades, con
25.8 millones de dólares. Y, en pandemia, fue de los que más eficientemente
cobraron las deudas de los ciudadanos que no podían pagar a través de sus
bienes. El banco del candidato Lasso siempre ha estado en bonanza en época de
crisis de los ecuatorianos pues, en 1994, tenía un patrimonio de $ 35 millones
de dólares y pasó a $ 54 millones en el año 98 y de $ 76 millones para el año
2002, según los datos de la Superintendencia de Bancos. Este fue el periodo en
el que se produjo el Feriado Bancario. Ahora, en el gobierno de Moreno, su
patrimonio pasó de $ 422 millones en el 2016 a $ 535 millones en el 2020,
creció más de cien millones en plena recesión, en una época donde sólo la banca
en sociedad con Moreno creció cuando el resto de la economía crecía al 0%.
Las críticas de los
sectores de oposición se han evidenciado durante toda la campaña de segunda
vuelta, que ahora mismo está en sus 10 días finales. Cuando Lasso cuantificaba
uno de sus más prósperos años como banquero, la población ecuatoriana venía de
una manifestación social de 2019, a causa del alza de precios de los
combustibles, que implicó la inmediata subida en los precios de productos de
primera necesidad. Esta medida del Gobierno de su aliado Lenín Moreno fueron apoyadas
por Lasso y su bancada, el movimiento CREO, en la Asamblea Nacional. Incluso la
represión que ejerció el Gobierno contra el sector indígena y otras
agrupaciones sociales.
Veinte años después, la historia se repite. El banquero Guillermo Lasso, como en el Feriado Bancario, se enriqueció mientras muchos padres y madres de familia perdían sus empleos, otros decidían dejar el país, y muchos perdían su vida por falta de atención médica o se suicidaban por no poder pagar las necesidades básicas de su familia. Cerca de 1 millón de personas fueron despedidas, a causa de la pandemia y la profunda crisis que ya venía acarreando el país sudamericano, por el mal manejo económico del gobierno de Moreno, que entre otras cosas pagó anticipadamente la deuda externa mientras la gente moría en las calles y nadie recogía sus cadáveres a causa del COVID19.
La misma pandemia llevó
al Gobierno de Moreno a proponer y aprobar, junto a la bancada de CREO de
Guillermo Lasso, la Ley de Apoyo Humanitario que redujo las jornadas laborales,
con baja en su salario, o en el caso de despido, con una liquidación menor a la
que les correspondía.